Eliminación de barreras arquitectónicas

POR UN LARDERO ACCESIBLE PARA TODOS

¿Cuántas veces hemos tenido problemas en Lardero para cruzar alguna calle con el cochecito o la silla de nuestros hijos, o nuestras personas mayores han tenido que subir o bajar algún bordillo demasiado alto y han corrido el peligro de tropezarse, o alguna persona con silla de ruedas ha tenido que recorrer algún tramo por la calzada porque en la acera no había paso suficiente?

AVANZA LARDERO quiere convertir Lardero en un municipio accesible para todas las personas, incluidas las personas con discapacidad física.

¿A quiénes afectan las barreras arquitectónicas?

Las barreras arquitectónicas son el principal obstáculo de este grupo de personas:

- Las personas con discapacidades: puede contar con una discapacidad física o una discapacidad sensorial como alguna deficiencia auditiva o deficiencia visual.
-Las personas mayores y de edad avanzada: las personas de la tercera edad son un grupo vulnerable que se ve afectado por las barreras arqueológicas.
-Las mujeres embarazadas.
-Las personas con una discapacidad física transitoria: aquellos con movilidad reducida temporal como pueden ser aquellos que han sido operados recientemente, con alguna lesión o enfermos.
-En Lardero existen las intalaciones del CRMF (Centro de Recuperación de Personas con Discapacidad Física) donde se ayuda a personas especialmente vulnerables.

¿Qué barreras arquitectónicas solemos encontrarnos?

Las Barreras Arquitectónicas Urbanísticas (B.A.U.): Son aquellas barreras que se encuentran en las calles y todo tipo de espacios públicos. Algunos ejemplos pueden ser las aceras demasiado estrechas, los escalones demasiado aislados, los bordillos o las señales verticales que se encuentran en medio de la acera y obstaculizan el paso. La diferencia de altura entre los pasos de peatones y la acera es una barrera arquitectónica para personas en sillas de ruedas, scooters de movilidad o con una silla de paseo.

Especial consideración debemos tener en  Lardero donde se emplaza el CRMF (Centro de Recuperación de Personas con Discapacidad Física), y daremos preferencia a los recorridos que lleven su acceso.

Las barreras arquitectónicas son elementos que obstaculizan o impiden la movilidad de las personas, ya sea en una zona exterior como en una zona interior. Son obstáculos que impiden el libre acceso o entorpecen la circulación en una zona. Además, son un impedimento social, ya que afecta al mundo de las relaciones y las comunicaciones.

La solución a estos problemas es la creación de un entorno sin barreras arquitectónicas. Las barreras arquitectónicas deben ser eliminadas para garantizar la integración de todas las personas de la sociedad y así, poder mejorar su calidad de vida: esto se puede realizar por ejemplo, mediante la instalación de rampas salvaescaleras y sillas salvaescaleras.

La accesibilidad es un factor clave para la inclusión social por lo que es necesario llegar a una accesibilidad universal. De esta forma, se fomentará una sociedad equitativa donde se nos permita ser igual independientemente de nuestras limitaciones. Para conseguir esa ansiada accesibilidad hay que derribar las barreras arquitectónicas y algunos de los métodos que se pueden utilizar son las rampas salvaescaleras y las sillas salvaescaleras.

Es beneficioso suprimir las barreras arquitectónicas porque:

  • Se proporciona accesibilidad a la sociedad.
  • Se mejora la calidad de vida y se favorece la autonomía de las personas.
  • Se facilita el acceso y el desplazamiento en espacios públicos y privados.